miércoles, julio 12, 2006

70 años: La conspiración

El triunfo del Frente Popular deja momentáneamente descolocada a la derecha y mientras José Antonio Primo de Rivera (líder y fundador de la Falange) reconoce el triunfo de la izquierda, Gil Robles (líder de la CEDA) urge a Portela Valladares (Presidente del Gobierno) a declarar el estado de guerra para evitar supuestas algaradas. Otros destacados políticos de la derecha como Calvo Sotelo se entrevistan con el presidente en un sentido parecido y el 18 y 19 de febrero de 1936 circulan rumores de un supuesto golpe de estado destinado a evitar al toma de posesión del gobierno del Frente Popular.

Finalmente, el 19 de febrero se forma el nuevo gobierno con la siguiente composición:

Presidente de la República:Niceto Alcalá-Zamora y Torres

Presidente del Gobierno: Manuel Azaña Díaz
Agricultura ........................... Mariano Ruiz-Funes García
Comunicaciones y Marina Mercante .... Manuel Blasco Garzón
Estado ................................ Augusto Barcia Trelles
Gobernación .......................... Amós Salvador Carreras
Guerra ................................ Carlos Masquelet Lacaci
Hacienda ............................ Gabriel Franco López
Instrucción Pública y Bellas Artes .... Marcelino Domingo Sanjuán
Industria y Comercio.................. Plácido Álvarez-Buylla y Lozana
Justicia ............................. Antonio de Lara y Zárate
Marina ................................ José Giral Pereira
Obras Públicas ........................ Santiago Casares Quiroga
Trabajo, Sanidad y Previsión Social .. Enrique Ramos y Ramos
Guerra .... .... José Miaja Menant

El nuevo gobierno, con ausencias tan importantes como la del PSOE, toma como primeras medidas la amnistía a los encarcelados por la Revolución de Octubre de 1934 y el restablecimeinto de la autonomía de Cataluña. Desde los sectores más radicales del PSOE, encabezados por Largo Caballero (a quien se apoda "El Lenin Español") y desde la CNT, se urge al gobierno a emprender reformas profundísimas de la estructura del Estado y a poner en marcha nuevamente proyectos como el de Reforma Agraria.

En Abril, el Parlamento revoca la presidente de la República Niceto Alcalá Zamora y se elige a Manuel Azaña (fotografía de la izquierda) como nuevo presidente. desde su puesto, azaña aboga por la participación del PSOE en el gobierno, en especial del ala más moderada de Indalecio Prieto, lo que no logra. El gobierno ante el temor de una intentona militar aleja a los generales sospechosos de golpismo de los centros de decición. Franco es destinado a Canarias, Mola a Navarra y Goded a las Baleares. Se reanuda finalmente la Reforma Agraria pero, a estas alturas, los jornaleros la perciben como insuficiente y se producen numerosas ocupaciones de fincas. Así mismo, se empiezan a tramitar nuevos estatutos de autonomía como el de Galicia y el País Vasco.

Por su parte, la derecha se radicaliza cada vez más y empiezan a formarse grupos paramilitares, en especial en la Falange a la que se han adherido gran parte de las juventudes de la CEDA. El líder de este último partido entra en contactos con el general Mola en vistas a tantear la posibilidad de un levantamiento militar.

En la calle la situación también se ha radicalizado con enfrentamientos, que frecuentamente acaban en el asesinato, de socialistas, comunistas, anarquistas y falangistas. Los partidos políticos no contributen a calmar los ánimos, al contrario. Calvo Sotelo, la figura más brillante de la derecha, se autodeclara fascista y hace llamamientos públicos al golpe de estado. El 1º de mayo, Largo Caballero lanza un discurso incendiario en la plaza de toros de Las Ventas. Ese mismo día corre el rumor de que unas monjas han repartido caramelos envenenados y se producen agresiones a religiosos y quema y destrucción de conventos e iglesias.

Por su parte, la derecha y los militares están preparando un golpe de estado en el que se logra la participación clara o la connivencia de la mayoría de los generales al mando de las distintas regiones militares con el apoyo económico de destacados empresarios. Curiosamente, el general Franco es uno de los más indecisos, probablemente ante el temor de que el golpe fracase. El plan de los conspiradores consiste en un pronunciamento militar al estilo decimonónico. Los generales sublevan a las guarniciones, declaran el estado de excepción y toman el poder pero, inicialmente no contemplan una guerra civil en sus expectativas. Lo que desde el principio parece claro es que tras el golpe se procederá al asesinato o encarcelación de los principales líderes políticos o sindicales de la izquierda en cada población. El golpe se fija inicialmente para finales de junio principios de julio pero la indecisión de varios generales obliga a retrasarlo.

En el interín, la violencia política en las calles aumenta. El día 12 de julio de 1936, militantes falangistas asesinan al teniente de la Guardia de Asalto José Castillo (foto izquierda), conocido por sus ideas de izquierda y por haberse negado a enfrentarse a los revolucionarios de 1934. El funeral es una manifestación de dolor por parte de la izquierda y durante la noche grupos incontrolados (probablemente miembros de la Guardia de Asalto) se dirigen al domicilio de Gil Robles para detenerlo a asesinarlo. Al no encontrarlo vana a buscar a Calvo Sotelo (foto izquierda) al que asesinan (13 de julio) y abandonan su cuerpo en la calle. Tradicionalmente, se ha considerado que este fue el punto en el que los militares deciden sublevarse contra el gobierno legalmente constituido. Tras este momento, Franco se adhiere al golpe.

Los detalles finales se concretan en Llano Amarillo (Marruecos) durante unas maniobras militares. Se fija la fecha del 18 de julio para la sublevación en áfrica y el 19 en la Península. El general Sanjurjo (exiliado en Estoril, Portugal) debía ser el jefe militar.

El 17 de julio, los mandos de la guarnición de Melilla se reúnen para ultimar los detalles pero son escuchados por un oficial que informa a Unión Republican y se traslada la noticia al presidente del gobierno. Se da orden de registrar el Departamento Cartográfico de la guarnición de Melilla (donde se habían reunido los conspiradores) pero finalmente, el coronel al mando de la guarnición (partícipe de la conspiración) llama a la Legión que arresta a los guardias de asalto enviados por el gobierno. Ante la situación, se decide adelantar el golpe al 18 de julio, fecha en la que se sublevan la mayoría de guarniciones de la Península aunque algunas dudarán hasta el día 19.

1 comentario:

Anónimo dijo...

13 de julio de 1936, asesinato del politico gallego Jose Calvo Sotelo; 12 de julio de 1997, asesinato del politico gallego Miguel Angel Blanco Garrido